Como psicóloga en trastornos de conducta alimentaria, se lo difícil o lo fácil que puede ser perder peso. Podría aconsejaros una serie de pautas para perder peso, las cuales habréis escuchado por activa y por pasiva, o simplemente ir a la cuestión del asunto, y esta cuestión se llama equilibrio.
Podemos probar con dietas milagros, sin menospreciarlas, en el momento que se abandonan provocarán un efecto rebote. Entonces, ¿porque volvemos a caer una y otra vez en manos de estas dietas milagrosas? Puede ser porque sea más fácil pensar que el problema es algo externo a nosotros.
La alimentación es el primer hábito que debemos modificar si queremos perder peso, pero no al precio de nuestro bienestar. Es simple, si queremos cambiar un hábito es porque lo que hacemos no es lo que necesitamos.
La idea es tan básica como consumir lo que nos hace falta, si nos excedemos perdemos el equilibrio. Con esto no quiero decir que no podamos darnos un capricho mientras perdemos peso, pero, habrá que modificar los hábitos que nos han llevado a esta situación.
No todos fallamos en los mismos hábitos, no todos tenemos la misma constitución y no a todos nos afectan de la misma manera los alimentos en nuestro metabolismo, el verdadero hecho que nos hace perder peso es identificar lo que a cada uno nos hace ganarlo.
La mayoría de nosotros incurrimos en dietas hipocalóricas, que afectan a nuestro estado de ánimo, y no nos proporciona la energía ni las calorías necesarias para afrontar nuestro día a día, llevando al agotamiento físico y psíquico.
Otro problema en nuestra alimentación es que no la adecuamos a nuestro estilo de vida sedentario, seguimos consumiendo productos elaborados, carnes y grasas en demasía, sustituyendolos por productos más adecuados a nuestras necesidades calóricas, como son las verduras, cereales o frutas.
Observar y modificar las conductas que realizamos cuando perdemos el equilibrio, es uno de los métodos más efectivos para dejar incurrir en las mismas y de esta manera perder peso sin necesidad de hacer dieta, en otras palabras, más que disminuir la ingesta de alimentos, tendremos que prestar atención a qué y a cómo ingerimos esos alimentos.
Otra manera de equilibrarnos es hacer deporte. Al igual que hay que saber elegir lo que comemos y cuándo lo comemos, también hay que saber elegir qué deporte practicar y cuando practicarlo. Para aquellos que aún no tenéis el gusanillo de la actividad física, tendréis que buscar deportes que vayan acordes a vuestras capacidades.
Personalmente, sería incapaz de practicar triatlón, fracasaría, y no obtendría ningún beneficio de la práctica deportiva. El truco está en escoger un deporte acorde a nuestras características físicas y psicológicas que nos ayude de manera efectiva a perder peso, y nos proporcione una vía de escape a nuestro día a día tan cargado de responsabilidades y tensiones al que no le podemos añadir más estrés por una alimentación insana o deficitaria o por practicar un deporte que no nos agrada, sólo porque sea considerado como “bueno”.
Tratamientos en IMAGEN CORPORAL avalados por estudios de nuestros psicólogos publicados en la Biblioteca Nacional de Medicina de los Institutos Nacionales de Salud de EE.UU. http://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC4382336/ .
Centro de Psicología Renacer colabora con:
http://www.centrodepsicologiarenacer.com/
Es verdad el error es que ingerimos mas calorías que quemamos, por lo menos en mi caso que llevo una vida mas bien sedentaria. Deberíamos ser mas conscientes de eso. Gracias por los consejos. Un saludo.
Me gustaMe gusta
Baixe e-book infundado da Liceu UOL HOST – Excerto a trecho:
da maneira que contar sua primeira empório realizável e também conheça a humanidade os processos entretanto particularidades essenciais apto a cenotáfio serviço. http://nature-tour.com/bbs/space.php?uid=439001&do=profile
Me gustaMe gusta
https://www.showmewhatyoumelt.com/10_Dicas_Na_opini%C3%A3o_de_Palestrar_A_Salto_Com_Pelo_Masculina
Me gustaMe gusta
Pingback: Enamórate de ti | Blog de Psicología